Soy

Soy la contradicción que rema contracorriente en mi torrente sanguíneo,

a veces fría como témpano de hielo,

otras ardiente , fuego, pasión desmedida, sentimientos a flor de piel,

a veces distante, viviendo permanentemente en la luna,

otras, cercana como una caricia, un susurro al oído, un abrazo sin por qués,

a veces  testaruda, siempre dialogante,

a veces perdida en mi mundo, otras, a pie de calle…

pero siempre yo, oscilando continuamente, locura constante,

inquieta, atrevida, tímida, salvaje…

Aquelarre

AQUELARRE

En noches de lunas despojadas
se entonan cantos de extintas lenguas
que resuenan y se mezclan
en un bosque de edificios poblado de sombras.

¡¡ Aquelarre !!, gritan y las condenan,
su delito, conectar su cuerpo con la tierra.

Hipocresía de quien se viste de valores
escondiendo la ignorancia en su corbata.

Aquelarre, porque piensan diferente,
no transigen con normas que atentan los valores
ni idioteces fundadas por los hombres
poblando de pájaros sus cabezas.

Injusticia enterrada en trajes de etiqueta,
falsedades que comulgan religiones
bajo nombres de dioses que lloran y se avergüenzan.

¡ Aquelarre ! y las señalan con el dedo,
acusando como hace tanto tiempo,
piras de palabras calcinando hasta los huesos
de esas brujas que reclaman dignidad,
entre palabras que suenan diferentes
de un idioma olvidado porque es justo.

En noches de lunas despojadas,
esas brujas que perdieron su caldero,
se encomiendan al conjuro de los vientos
y protestan gritando realidades.

! Aquelarre !, gritan los uniformes,
bajo el poder de un poder mal entendido,
convirtiendo al justo en miserable.

Y es así hoy, como en era inquisitoria,
se persigue a quien se sale del rebaño,
por eso sonríe si te miran diferente
y si gritan ¡ aquelarre ! tras tu paso.

Carmen Cano.

Eres

Eres

Eres el verso que en cada latido
recorre mi cuerpo
y me estremece en el misterio
de tenerte sin tenerte.

Eres silencio y palabra,
que me inunda y me desarma,
es tu mundo mi refugio
y tu universo mi calma.

Eres hechizo de luna,
que entra por mi ventana
y en suaves besos de plata
remienda mis alas rotas.

Eres embrujo del cielo,
bordado de noches largas,
cuando acaricias mi cuerpo
con las olas de tus playas.


Eres tempestad y calma,
eres mi cielo y mi suelo,
mis raíces y mis alas,
mi poema y mi misterio.

Carmen Cano (2012)

Silencio

Silencio...

Un grito sordo que rompe la madrugada
almas que vagan errantes, desamparadas,
silencio, sólo silencio, no se oye nada
y sin embargo nadie se calla.

Jaula de grillos, ecos sonoros, noche cerrada,
cuanto resuena el silencio... y nadie habla,
callan palabras, gritan miradas,
silencio, sólo silencio, no se oye nada.

Voces que gritan como enjauladas,
gritos nocturnos buscando el alba,
sueños que sueñan con madrugas
donde no haya silencio, sólo palabras

Y sin embargo, silencio, sólo silencio, no se oye nada

Carmen Cano  (13/09/2010)

Cápsula del tiempo

Cerrado... no hay aire,
en medio de esta oscuridad
sofocante... irrespirable,
se abre un universo
de posibilidades.

Puedo imaginarme
el brillo de plata
que hay en tu mirada,
mientras despedazas
trocito a trocito
partes de tu alma.

Un suave roce,
tu tacto de fuego,
tejedor de tiempo
anudando sueños.

Ahora puedo ver
un deseo profundo,
surgido del centro
de la misma tierra,
grabado en la piedra
que soñó ser pájaro
e inició su vuelo.

Si guardo silencio,
quién sabe si escuche
un suave latido,
algo atolondrado,
tal vez confundido,
un explorador
que en pasos de acero
tomó su camino.

Y un beso furtivo...

Cerrado... no hay aire,
pero en tu interior
se guarda un secreto
que solo conoce
ese pecho ardiente,
que al abrir tu esencia,
pronuncia tu nombre.

Carmen Cano.

Absurdo

ABSURDO.

Absurda pregunta la que me pregunto

cuando una duda me anda rondando

y el cuestionamiento, absurdo,

se vuelve un tormento.

absurda la idea de atraparte en versos,

absurdo el intento de poner palabras a lo inexplicable,

absurda la ausencia

y absurdo este tiempo.

Silabeo lento, " ab-sur-do",

en un torpe intento, de que haya entendimiento,

en este cerebro medio aletargado,

sumido en lo absurdo de estos pensamientos.

Y como una corriente de río sin agua,

me estanco en la idea de volverme dura,

como aquella piedra que implacable espera

el  paso de un tiempo que le pula aristas y la deje plana.

Me río sin ganas… que absurda es a veces la torpe ignorancia.

Así que retomo lo absurdo de un tiempo vacío, sin nada…

y quiero ser pájaro, extender mis alas

y volar tan lejos, donde el horizonte ya se desdibuja

y tampoco hay nada.

Pero sopla el viento y parece que la cordura

abandona de nuevo a esta pobre loca,

ahora sí me río y una carcajada

me marca lo absurdo del tiempo perdido,

pues después de todo,

de la absurda idea, 

lo absurdo del mundo,

la absurda torpeza,

lo absurdo del tiempo…

tan solo soy yo y realmente, por una vez,

tan solo es eso lo que quiero ser.

Bailes prohibidos

BAILES PROHIBIDOS

Manos temblorosas que cabalgan,

como potros desbocados,

en caricias, por mi blanca desnudez,

besos como mar de sentimientos,

que no alcanzan, para saciar esa sed

Boca con boca, piel contra piel…

Pasión desmedida,

en cuerpos que anhelantes se desean,

que se buscan, que se gritan,

que reclaman un pedazo de locura

para entregar sin medida lo que ocultan.

Bajar barreras, el alma expuesta…

Baila conmigo,

hazme viajar al infinito,

que no quede un pedazo de mi cuerpo

que no sea por tus manos recorrido.

Sueños de locos,...pasión de cuerdos.

Viaje que nos lleva más allá de todo mundo,

explosión de cariño…Tan sólo amor.

Amor de amantes,

amor de cuerpos, que en gemidos se devoran,

que en besos que no sacian su locura,

van dejando sentimientos,

en caricias cinceladas en el alma.

Carmen Cano.

A un poema descarriado... (Video poema)

A un poema descarriado...

A UN POEMA DESCARRIADO

Una vez fui poema,

me vistieron de gala,

recogieron mi pelo,

ni un solo mechón suelto

que pueda deslucir

el resto del atuendo.

Zapatos de tacón,

los pasos bien medidos

y un vestido de noche

del mejor diseñador.

Ajustado el corsé,

marcando mi silueta,

pues debo, insinuante deslizar,

por los labios de un poeta.

Pero soy verso rebelde

y no quiero poetas,

prefiero un trovador

que me haga vibrar

y entregue el corazón

en cada letra.

¡Fuera esos zapatos!,

no quiero más medidas,

¡Adiós, triste corsé!,

dejemos que entre el aire

e invada mis pulmones,

que una gota de rocío

deslice lentamente,

llegando hasta mi vientre.

Después de desnudarme,

ahora nadie se atreve

a llamarme señorita,

dicen los entendidos,

que ya no soy poema,

más yo me siento libre,

pues sé que soy poesía.

Carmen Cano.

Últimas primeras veces

Últimas primeras veces...

Recuerdas la primera vez que miramos juntos las estrellas?

Tú, cabalgando en un sueño,

yo, mirando desde el otro lado de la luna,

Las contamos una a una…,

para cuando terminemos, comenzaremos de nuevo.

Y recuerdas, amor mío,

aquella primera vez que una música lejana nos desnudó de los miedos?

al compás de los latidos se unieron dos corazones que siempre latirán unidos.

Pienso esa primera vez que tus manos, me rozaron sin rozarme,

y tus labios con un beso en el aire,

dieron aliento a los míos para llenarlos de sueños.

Y la primera palabra titubeando nerviosa,

o aquella primera vez, que tus labios acariciaron mi nombre,

muy despacio, tan despacio como si al pronunciarlo me moldearas en él.

O el primer beso de amor, largo, intenso, profundo,

aún palpita en mis labios el sabor de aquel segundo.

Y recuerdas el paseo, de tu mano, recorriendo tus recuerdos?

Los dos trepamos de un salto la colina del olvido,

para revivir unidos tantos recuerdos perdidos...

Lo recuerdas, amor mío?

Cómo no vas a acordarte, si hace apenas un suspiro, pues cada día contigo es una primera vez.

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Venus (Video poema)