La sombra de la duda,
la imaginaria conciencia concebida,
la continua indecisión,
el amor a sobresaltos...
El daño de la duda,
que es herida que amenaza siempre al corazón.
Y la evidencia se marchó a vivir entre las sombras,
agazapada, temerosa, herida y desolada...
Así la duda triunfante entró en la sala,
reina victoriosa en la batalla
y bajo un manto de opresiones y silencios.
arrasó el sentimiento que quedaba.
"Silencio, silencio, no digas nada... que la soberana manda"
Pero presta llegó entonces la palabra,
cincelada por las manos de un orfebre,
sustentada por el paso de los tiempos,
avalada por el peso de una lágrima.
"Te amo"
Y tan sólo dos palabras acabaron con la duda que quedaba.
Carmen Cano
Hermoso tu blog, es un placer visitarte. Abrazos (Glaviana)
ResponderEliminarMil gracias Glaviana por tu visita, siempre eres bienrecibida... Abrazos!
EliminarMuy lindo blog señora Carmen Cano,felicitaciones Tito Sanguinetti.
ResponderEliminarQue grata sorpresa Tito. Gracias por pasar por aquí y acompañarme. Besos
Eliminar